¿Cómo saber si estás estresado? Trucos para prevenir el estrés

¿Cómo saber si estás estresado? Trucos para prevenir el estrés

A día de hoy, muchos de nosotros vivimos una vida muy ajetreada, trabajo, familia, muchos horarios que cumplir. En muchos casos, al final del día  no hemos llegado a realizar todo lo que nos hubiera gustado, y aparece el estrés. Llegamos a vivir en un estado de estrés constante, y normalizarlo no es nada bueno para nuestra salud. En este artículo vamos a hablar de cómo saber si estamos estresados y cómo prevenirlo.

¿Qué es el estrés?

El estrés es una forma en la que el cerebro y el cuerpo responde a un desafío, constituye un estado de tensión física y emocional que reacciona a un estímulo.

El estrés puede llegar a ser beneficioso o perjudicial, en función de las circunstancias. En el caso en el que el estrés nos beneficia, actúa como un proceso de adaptación a los acontecimientos y ayuda al organismo a reaccionar frente a distintas situaciones. El estrés en pequeñas dosis puede ser sano y beneficioso, ya que ayuda a la persona a ser más resolutiva y a actuar ante los estímulos de la vida diaria.

Sin embargo, el problema es cuando se dan circunstancias en las que el estrés nos perjudica. Cuando hay un estrés excesivo o no se controla, pueden llegar a producirse distintas enfermedades mentales.

¿Cómo saber si estás estresado?

El estrés tiene un impacto tanto a nivel físico y mental. En muchas ocasiones, no sabemos diferenciar el estrés de otros problemas, pero aunque no te sientas agotado o sumido en una depresión, puedes sufrir estrés.

A continuación, vamos a ver algunas señales cotidianas que te pueden indicar que estás pasando por un periodo de estrés.

Dolor en la mandíbula y en los dientes. El bruxismo aparece en algunas ocasiones por el excesivo estrés que se sufre. Rechinar los dientes puede llegar a provocar un dolor inmenso en la mandíbula, dientes o cabeza.

Pérdida de memoria.  La falta de memoria es un síntoma claro de estrés. Si ahora tienes problemas de concentración y olvidas cosas que antes eran fácil de recordar, probablemente, te toque parar o reducir las tareas para disminuir el estrés.

Desequilibrio en el ciclo menstrual. En el caso de las mujeres, el cambio repentino del ciclo menstrual puede estar indicando que estás sometida a demasiado estrés, hay que prestar atención.

Problemas digestivos.  La salud digestiva y mental están estrechamente ligadas por el estrés. A un mayor nivel de estrés, se puede producir estreñimiento, diarreas o problemas gástricos.

Dolores musculares. Cuando se sufre estrés, los músculos se tensan involuntariamente, lo que provoca dolor corporal.

Dolor de cabeza continuado. Como hemos visto en el apartado anterior, los músculos se tensan con el estrés y producen dolores desde la cabeza a los pies. Las migrañas o las jaquecas pueden ser un efecto secundario del estrés. Así que si estás luchando contra estos dolores de cabeza, puede que tu cuerpo te esté mandando un mensaje de que debes parar.

Cambios en el apetito. En muchos casos, cuando se sufre de estrés, el apetito cambia. Una parte de la población, experimenta un aumento del apetito, llegando a comer más y de forma ansiosa, sin embargo, otra parte de la población, pierde el apetito, dejando de comer. Esto se muestra en el cambio de peso.

Aparece la irritación. Cuando nuestro cuerpo sufre de estrés, nuestra mente le manda estímulos para poder salvarlo de este problema. En algunos casos, este estímulo se convierte en irritación y malestar.

Estos son solo algunos de los síntomas más visibles del estrés. Hay que tener todo ello en cuenta, y cuando tu cuerpo te manda señales, parar, reflexionar y buscar ayuda para no llegar a problemas mayores.

Trucos para prevenir el estrés y evitarlo

No siempre se puede evitar el estrés en la vida cotidiana, pero sí se puede aprender a manejarlo. A continuación os damos algunos trucos para prevenirlo y evitarlo:

1. Establecer prioridades

Hay que aprender a organizarse bien, ver que cosas hay que hacerl en el momento y ver que tareas pueden esperar. Además, es necesario aprender a decir que no, cuando hay momentos en el que nos encontramos saturados.

2. Tomarse tiempo para uno mismo

Aunque en los momentos de estrés se piense que no se llega a todo y que le faltan horas al día, es necesario pasarse y tomarse un tiempo para realizar actividades que nos relajen, como meditar, leer o hacer algún tipo de deporte.

3. No obsesionarse con los problemas

En ocasiones, entramos en círculos viciosos de problemas que no podemos sacarnos de la cabeza. Nos auto machacamos con lo que podía haber sido y no fue. Lo importante es centrarnos en lo que hemos conseguido y celebrarlo.

4. Acuda a un profesional de la salud mental

En muchas ocasiones, es difícil salir uno solo del nivel de estrés que se está sufriendo, por eso, es importante acudir a un profesional de la salud mental para apoyarte y ayudarte a salir del estrés.

El estrés es un síntoma que probablemente haya pasado o pasará por nuestras vidas, lo ideal es saber atajarlo a tiempo y que no vaya a más. Por eso, saber los síntomas y cómo poder evitarlos es fundamental en nuestro día a día.