El insomnio: síntomas y causas

El insomnio: síntomas y causas

Hoy vengo a hablarte sobre el insomnio, veremos las causas principales y por lo tanto cómo podemos evitarlo o al menos controlarlo. 

El insomnio se trata de un trastorno más frecuente de lo normal en las últimas décadas y principalmente causa dificultad para conciliar el sueño o mantenerlo. 

También puede provocar que te despiertes demasiado temprano y no puedas volver a dormirte. A largo plazo puedes sentirte muy cansado, con una sensación de agotamiento durante todo el día lo que puede provocar que afecte a tu salud. Puedes notar una falta de energía para realizar las tareas cotidianas, tu trabajo, la relación con tu entorno, etc. pudiendo afectar también a tu estado de ánimo.

Por supuesto es una de las causas principales en nuestra sociedad de hoy en día y que pueden dar origen a deficiencias en nuestro desempeño laboral y a nuestra calidad de vida.

Se estima que necesitamos entre 7 y 8 horas de sueño para poder reparar ese cansancio natural derivado de nuestro trabajo diario, aunque varía dependiendo de la persona y de la edad.

Algunos adultos sufren insomnio a corto plazo, que puede  durar tan solo unos días y sabemos que si persiste en el tiempo, podemos estar hablando de otras causas que lo provoquen, al estrés o a un acontecimiento traumático.

Otras personas sufren insomnio a largo plazo pudiendo llegar a durar varios meses y en estos casos, el insomnio puede ser el resultado de otras afecciones o adicciones como medicamentos. 

Síntomas del insomnio

Quiero hablarte también sobre los síntomas del insomnio. La información es poder. Por lo general, conociendo los factores y los síntomas del insomnio en mayor grado, será más fácil poner solución antes de que sea demasiado tarde.

Algunos de los síntomas del insomnio pueden ser:

  • Dificultad para conciliar el sueño durante la noche.
  • Sufrir cansancio o somnolencia durante el día. 
  • Despertarse más de 2 veces durante la noche sin una razón aparente como necesidad de ir al servicio, beber agua, etc.
  • Un considerable aumento de los errores sin causa justificada.
  • Despertarse muy temprano, cuando hablamos de temprano nos referimos a dormir menos de 5 horas de forma continuada.
  • No sentirse con energía renovada al iniciar el día. 
  • Hablar en exceso o volcar preocupaciones constantes respecto al sueño y sus parámetros adecuados. 
  • Sentirse irritado, tener depresión o sufrir episodios de ansiedad.
  • Dificultad para concentrarse en las tareas o recordar hechos, situaciones o fechas. 

Causas principales del insomnio

Nos encontramos con varios enfoques respecto al sueño. 

Podría tratarse como el problema principal o estar asociado con algunas enfermedades, por eso las formas de tratamiento podrían variar. 

Para ello, lo más importante es conocer las causas principales:

  • Si estamos sufriendo estrés, el insomnio aparecerá tarde o temprano. Las preocupaciones normales del día a día, del trabajo, los estudios, la salud, la economía  o la familia. Los acontecimientos estresantes de la vida, la muerte o la enfermedad de un ser querido, un divorcio o una pérdida en tu entorno.
  • Los ritmos circadianos actúan como reguladores del metabolismo y la temperatura corporal y la alteración de los mismos puede causar insomnio. Las causas abarcan el desfase horario por los viajes a través de varias zonas horarias, el trabajo en turnos de tarde o de mañana, o el cambio de turno con frecuencia de modo que los viajes u horarios de trabajo sin control también pueden ser causas.
  • Mantener malos hábitos de sueño también puede ser causa directa ya que los horarios irregulares a la hora de acostarse, las siestas prolongadas, las actividades estimulantes antes de acostarse, un entorno de sueño incómodo puede afectar mucho a nuestra calidad del sueño. Utilizar la cama para trabajar, para comer o para ver televisión. También el uso de ordenadores, televisores, videojuegos, teléfonos inteligentes u otras pantallas antes de acostarse pueden afectar el ciclo del sueño.
  • Una alimentación en exceso en la noche. Está bien ingerir algún alimento no pesado antes de acostarse, pero comer en exceso puede causar molestias físicas cuando estás en la posición tumbado y muchas personas que sufren acidez estomacal o reflujo retrógrado de ácido pueden sufrir para conciliar el sueño.
  • También puede estar asociado y ser una causa del insomnio, sufrir enfermedades o el consumo de determinados fármacos. Un tratamiento adecuado de la enfermedad puede ayudar a mejorar el sueño, pero estaremos muy atentos ya que el insomnio puede persistir después de la mejoría de la enfermedad. 
  • Si sufrimos trastornos de salud mental como ansiedad, trastorno por estrés postraumático, depresiones, trastornos alimentarios, etc. 
  • El consumo de ciertos medicamentos pueden afectar al sueño, como  algunos antidepresivos y medicamentos para el asma o la presión arterial, analgésicos, medicamentos para las alergias y resfriados. Existen también productos que se venden como adelgazantes y que contienen cafeína y otros estimulantes que pueden alterar el sueño.
  • Otras afecciones relacionadas con el insomnio como sufrir dolor crónico, el cáncer, la diabetes, las enfermedades cardíacas, el asma, la enfermedad del reflujo gastroesofágico, el hipertiroidismo, la enfermedad de Parkinson y la enfermedad de Alzheimer.
  • Algunos trastornos relacionados directamente con el sueño como sufrir apnea del sueño produce pausas respiratorias periódicas durante la noche, lo que interrumpe el sueño y resta calidad a este proceso. 

Sufrir el síndrome de las piernas inquietas es otra causa al desear de forma irresistible moverlas durante la noche.

  • El consumo de cafeína, nicotina y/o alcohol.  

Insomnio y envejecimiento

Sabemos que el insomnio se vuelve más frecuente con la edad y a medida que envejeces, tal vez puedas sufrir de insomnio en cualquiera de estas formas:

  • Puedes sufrir cambios en los patrones de sueño siendo más probable que los ruidos y otros cambios en el entorno te despierten. A medida que cumplimos años,  nuestro reloj interno se adelanta, de modo que te cansas más temprano por la noche y te levantas más temprano. Los cambios en la actividad diaria es posible que también pueda afectar al contar con menos actividad social, laboral, etc.
  • El aumento del consumo de medicamentos. A ciertas edades, quizás tengamos que vernos obligados a consumir algún tipo de medicación como regulación de nuestro metabolismo, lo que aumenta la probabilidad de tener insomnio.

El sueño es uno de los patrones más importantes que poseemos para mantener una buena salud a nivel general junto a una dieta sana y trabajo físico. 

Recuerda que el insomnio puede afectar tanto mental como físicamente. 

Si necesitas que hablemos sobre el insomnio o necesitas ayuda, puedes contactarme.